La eterna lucha de los padres por el uso de la tecnología En esta conferencia, gracias a la invitación del centro de Aprendizaje y Desarrollo San Ángel, se aborda la preocupación de los padres de familia y educadores por el «excesivo uso» de aparatos tecnológicos por parte de los adolescentes. Por favor, copia y pega el siguiente enlace en tu navegador para acceder a la charla. A través de las teorías de la psicología del desarrollo, se descubre cuáles son los mecanismos que hacen tan atractivo el uso de la tecnología y se brindan claves de comprensión y apoyo a la adolescencia. https://vroom.gvalor.co/playback/presentation/2.0/playback.html?meetingId=b674cf5670bb62053d767c67bacf1ddb3c12ceb3-1603316632545
¿Se dejan acompañar los adolescentes?
«Acompañar a un adolescente es entender su desarrollo psicológico» Justo Andrés Mesa, CEO de PicoTest, realiza una escuela de padres en donde la idea central para poder comprender las decisiones y acciones de los adolescentes es poder pensar, recordar y entender las acciones propias en esas edades. En la conferencia se hace un llamado a la reflexión adulta, acerca de las grandes ventajas de acercarse emocionalmente a escuchar a los hijos. Vea la conferencia completa aquí.
¿Cómo saber qué debe estudiar mi hijo?
Una de las preocupaciones más frecuentes para los padres de familia de los adolescentes de último año escolar, es saber qué quiere estudiar el hijo, pues generalmente no se reciben respuestas específicas, o no se puede hablar a profundidad de lo que se quiere. La situación en ocasiones es tan preocupante, que los padres, en su afán por apoyar y generar estrategias de acompañamiento para los hijos, llegan incluso hasta a utilizar la presión inadecuadamente, de tal forma que el resultado de las intervenciones es totalmente contrario a los intereses de una y otra parte. A veces lo que se crea es un vacío relacional que los aleja cada vez más de las verdaderas posibilidades de apoyo y seguimiento. Ningún padre de familia quiere alejarse de sus hijos, y menos en un momento tan decisivo de la vida, como lo es el momento de las elecciones profesionales; adicionalmente, para el adolescente –así le sea difícil reconocerlo- obtener el apoyo de los padres, y contar con su beneplácito a la hora de escoger carrera, es tan importante como tratar de no equivocarse con la opción. En este sentido, contamos con dos partes, que crean conflictos -o malentendidos- simplemente por dificultades en la comunicación, y no por una incapacidad real para acercarse y apoyarse. Por eso, ahora se mencionarán los errores más comunes que muchos de los padres de familia cometen, a la hora de querer saber qué quiere estudiar el hijo, para luego elaborar una serie de recomendaciones para atender a la situación de la forma más adecuada posible. Confundir las expectativas propias con las de los hijos Suele suceder que a la hora de enfrentar la crianza, los padres de familia asumen como modelo, lo que vivieron con sus propios padres, cuando ellos eran jóvenes. Por esta razón, es tan común escuchar frases como “yo quiero darle a mi hijo todo lo que yo no tuve”, o “me gustaría que no viviera esto que yo viví para que no sufra tanto”. Si bien tales deseos son totalmente válidos, se debe entender que la vida de los hijos es una vida diferente a la de sus padres, y que en ese sentido, todo lo que se haga con ellos es nuevo y debe tener un sentido nuevo, renovado y con significados diferentes. Querer saberlo “todo” En el proceso de construcción de la identidad que todo adolescente lleva a cabo en sus días de colegio, lo más normal es que se empiecen a construir barreras ante los adultos, y sobre todo ante los padres, pues lo que más quiere el joven adolescente es poder diferenciarse, individualizarse, y construir sus propios significados y estilos de ser. Este proceso, en ocasiones, es doloroso para los padres, quienes sufren del rechazo de sus hijos ante los intentos repetidos por acercase a su vida. Muchos padres se quejan de que su hijo no les cuenta nada, o no los tienen en cuenta para sus decisiones y su vida, pero este comportamiento está indicado para las edades comprendidas entre los 12 y los 19 años, y es considerado un paso necesario para generar desarrollo mental, emocional y social. Imponer las preconcepciones La mayor experiencia que tienen los padres de familia en la vida, les lleva a creer firmemente que tienen mayores argumentos para poder decidir de forma más adecuada que su hijo adolescente. En ese caso, si bien la experiencia es muy buena consejera, quien es el responsable total de la decisión es el hijo, y no el padre. Esto se explica porque cada ser humano, va construyendo a lo largo de su vida unas preconcepciones que dirigen su vida, y orientan sus pensamientos y su acción hacia tal o cual sentido. Cuando un padre de familia impone sus preconcepciones, lo que hace es tratar de imponer su forma de ser, y tal actitud lo que crea es la huida y el alejamiento del hijo, pues lo que más desea éste, es poder independizar su vida y su personalidad de la gente a su alrededor. Como bien se puede ver, estos tres errores fundamentales en la estrategia paterna para poder saber qué es lo que quiere hacer el hijo con su vida, se basan en dificultades en la comunicación, más que en un deseo genuino de hacer daño o de alejar a los hijos. Por eso, hacer consciencia de que no podemos caer en ellos es el camino para poder recorrer muy de cerca el proceso de elección de carrera. Por eso, ahora se mencionarán las tres formas de enmendarlos: Construir expectativas realistas. Una de las cosas más valiosas que puede hacer un ser humano con otro es valorarlo por lo que realmente es, sin esperar de más, y sin echar de menos lo que no se haga. O sea, ajustando los deseos personales con lo que la realidad indica. La forma en que esto se vive en la dinámica entre padres e hijos tiene que ver con la proyección que cada padre de familia le haga a su hijo de su satisfacción por el trabajo, por sus decisiones, y en últimas, por la elección profesional que hizo cuando era adolescente. El padre de familia debe “dejarse ver” ser transparente en sus emociones positivas con sus hijos, y debe ser capaz de contagiar pasión, o magia por lo que hace. El hijo debe encontrar, solamente viendo a sus padres, que el mundo del trabajo es apasionante, que está lleno de retos, y que si bien puede traer muchas satisfacciones, a veces también estresa o desequilibra. Esta percepción le brindará al joven sentido de realidad, y la capacidad para pensar y decidir con base en la realidad, y no desde expectativas que muy pocas veces se cumplen. Entender la “vida privada” Como padres de familia es totalmente válido estar atento e interesado en lo que pasa con sus vidas, lo que generan sus emociones, y lo que viven mientras crecen, pero a medida que el desarrollo se va imponiendo, la necesidad de los hijos de estar al
Test vocacionales en línea
TEST VOCACIONALES EN LA RED Para cualquier orientador escolar, encargado de realizar procesos efectivos de formación vocacional con los estudiantes de últimos años, es un desafío contar con pruebas de orientación profesional que sean precisas, y que realmente den cuenta de la realidad específica y profunda de cada joven evaluado. No es un secreto para nadie que en la web existen infinidades de opciones, pues al insertar en los buscadores la palabra clave “test vocacionales en línea” son más de diez mil los resultados con ofertas como “test gratis”, “descubra gratis para qué es bueno”, etc. En realidad, no es fácil entender cómo un test de categoría, preciso, probado y serio, pueda ser gratis en páginas de todo el mundo, y los expertos recomiendan que nunca confiemos en tales ofrecimientos, pues de esa forma lo que hacen los piratas cibernéticos es capturar nuestros datos a través de formularios, y usarlos con otros fines. El poder en nuestra era de la información es contar con grandes bases de datos para enviar publicidad, o para generar mercadeo global de productos. Por esta razón, los orientadores escolares deben ser cada vez más cautelosos en el proceso de buscar y elegir un test vocacional adecuado para su institución, responsable con la información de sus estudiantes, y certero en cuanto a la presentación de sus resultados, es decir, que el gran desafío para el orientador es que sea capaz de discernir, de todo ese universo de resultados virtuales, cuál es verdaderamente serio para aplicar, y cómo se maneja y presentan los resultados con los usuarios La primera generación de test virtuales Facilitaron la labor del orientador escolar, de forma efectiva, fueron una especie de “traducción” de los test tradicionales en papel, al mundo virtual. En este sentido, el gran avance no se dio ni en las preguntas ni en las formas de respuesta, sino en la aplicación, pero sobre todo en la calificación, pues se automatizó este proceso, liberando así al orientador de gastar horas y horas calificando, a mano, cada una de las escalas, para poder hallar los resultados. En promedio, un orientador -bien entrenado- podía invertir casi media hora en la calificación de un solo test, y luego debía usar el manual de instrucciones para poder elaborar el informe de cada uno de ellos. Todo ese desperdicio de tiempo jugaba en contra de su labor, pues los estudiantes –adolescentes por cierto- no querían esperar más tiempo por sus resultados. Se le debe agradecer a esta primera generación de test virtuales, que renovaron con mucha valentía, un proceso que desde siempre se había hecho con papel, y de forma presencial en cada colegio. Algunas de las dificultades relacionadas con esta innovación tienen que ver con la inseguridad propia de las redes en el manejo de la información; por esa razón se contaba con códigos de acceso un poco engorrosos, el orientador tenía que llevar a los muchachos a las salas de sistemas del colegio, debía estar presente para “vigilar” que no se copiaran las respuestas y para que tomaran “en serio” la evaluación, y en fin se operaba de forma estructuralmente tradicional, pero con un computador de por medio. Avance de la psicometría Por fortuna, la psicometría ha avanzado tanto como los sistemas de información, y la tecnología ha podido ser usada para solucionar algunos de estos viejos inconvenientes, brindando así herramientas cada vez más efectivas a los orientadores, quienes ahora tienen todo un universo para elegir su mejor opción de test vocacional virtual, a costos mucho menores. La segunda generación de los test virtuales llegó al colegio con el aumento en las velocidades de navegación, por esta razón, los orientadores escolares pudieron contar con aplicaciones de pruebas cada vez más ágiles, que “no se caían tanto” por fallas en la comunicación, y con la gran hazaña de automatizar el proceso de creación de informes y gestión de la información grupal. Es decir, que de manera inmediata podía acceder a los resultados de cada estudiante, y podía analizar variables grupales para hacer comparaciones intra sujetos, intra grupos e incluso, intra cohortes. Cambio estratégico Fue tan estratégico este cambio, que los datos arrojados por los orientadores en su proceso de evaluación profesional empezaron a servir no solo para que los estudiantes escogieran mejor su carrera, sino que se convirtieron en un medidor del estado real de cada grupo, y pudieron ser utilizados por el resto de la institución para generar planes especiales de refuerzos académicos, o estrategias extra para trabajar dificultades en ciertos temas. Ya se empieza a hacer evidente, que con la segunda generación de los test virtuales, el rol del psicólogo orientador se posicionó con mayor credibilidad y utilidad dentro de la institución educativa. Pero aún falta la tercera generación de test vocacionales en línea, pues la innovación en el campo de la tecnología no cesa, y cada vez se generan ideas y emprendimientos más creativos y efectivos. Esta última generación de pruebas vocacionales virtuales aprovecha todo el camino recorrido anteriormente. Se vale de las grandes velocidades de transmisiones de datos, usa la optimización de las estrategias de calificación para seguir siendo instantáneas en la entrega de resultados, organiza y analiza la información por grupos de interés, garantiza, por medios legales vigentes, la seguridad y el trato ético de la información enviada por los usuarios, y en fin, inserta dentro de su desarrollo todo lo aprendido históricamente. La gran innovación está en que esta última generación de test ha usado la comunicación social, el diseño gráfico, el diseño web, la neuropsicología, y la psicología del desarrollo, para generar pruebas que no parezcan pruebas, y que eliminen en el usuario la sensación de “estar siendo evaluado” para cambiarla por una experiencia agradable, única, sencilla y tranquila, garantizando así un acercamiento más natural y por lo tanto, unas respuestas más sinceras de parte de lo estudiantes que la aplican. PICTOTEST Es uno de estos test de última generación, en cuyo centro se encuentra la psicología del desarrollo adolescente, y por esta razón no tiene
¿Son precisos los test vocacionales?
Cada día aumentan más las necesidades de los padres de familia de estar atentos en el seguimiento y el apoyo de los hijos en los procesos de elección de carrera, y la preocupación es creciente porque día a día se les presentan a los adolescentes más y más opciones de escogencia, de tal forma que lo que se crea es confusión, y en algunos casos, incapacidad para la toma de decisiones, a raíz de la desorientación y el exceso de oferta. Por fortuna para ellos, a medida que crecen las opciones de carreras, también se presentan nuevas estrategias y herramientas para orientar mejor a los jóvenes, con el riesgo asociado de que son tantas, y tan variadas, que es difícil escoger, o saber si son precisas, si brindan información certera y veraz sobre los hijos, y sobre su futuro profesional. Para eso, cada padre de familia, en su proceso de acompañamiento en la elección de carrera del hijo, debe prepararse para ser un guía adecuado, que sin ser experto en el tema, tampoco es un ciego dando palos, sino un ser humano con experiencia, que ha investigado, y que sabe reconocer dónde está la precisión de los test vocacionales, y cómo escoger el mejor para ayudar a su hijo de la mejor forma. A continuación, algunas de las preocupaciones objetivas que los padres de familia deben tener con respecto a los test vocacionales en línea, y algunos posibles caminos para despejar dudas. Seguridad de su información Uno de los grandes valores a proteger en el mundo de hoy es la información relacionada con nosotros mismos, nuestros datos personales, los datos de contacto, la información bancaria, y en general, todo lo que nos pueda definir en algún momento. Gracias a las redes sociales, los datos de muchos usuarios circulan por la web, y en algunas ocasiones son captados para realizar suplantaciones de identidad, o hasta delitos más graves. Por eso, una de las principales cosas a tener en cuenta a la hora de escoger un test vocacional preciso y confiable es saber cómo manejarán la información personal de los usuarios en la plataforma visitada. Usted, como padre, debe percatarse de que el sitio web contenga una política de manejo de datos responsable, visible, y claramente identificable, lo cual indicará que el sitio web atiende a las recomendaciones legales, y minimiza las posibilidades de que sus datos estén siendo “pescados” para utilizarlos con otros fines. De dónde viene el test vocacional en línea Conozca la empresa que construyó el test vocacional. Lo más importante es que el test escogido provenga de una empresa, legalmente constituida, pues esto asegura que estén sujetos a la legislación actual sobre comercio electrónico, y asegura también que tengan mecanismos institucionales de soporte al cliente, acompañamiento, garantías de producto y demás. Cuál debería ser el costo Este punto se relaciona directamente con la condición anterior, pues para poder brindar un servicio de calidad, el test vocacional en línea debe tener valor económico para el usuario. Es muy peligroso aceptar informes, demostraciones, o pruebas gratis completas, pues generalmente estas se hacen para otros fines. Todo el proceso de construcción del test, de análisis de la información y de gestión de la información tiene un costo, y lo más normal es que se cobre por eso. Así que, padre de familia, dude si se trata de algo “milagroso” y que además se presenta como gratis. El valor puede variar bastante de acuerdo al paquete de servicios que ofrezca cada plataforma, y esto puede ir desde una sencilla escala de valoración de habilidades, o intereses, hasta una batería completa de varias sesiones de aplicación, con servicios de interpretación o video chat con orientadores en vivo. Ojo, es muy importante que el proceso de pago se realice en lo que hoy en día se denomina “sitio seguro”, el cual posee certificados de autenticidad y de privacidad de los datos de sus tarjetas bancarias. Generalmente, en ninguna plataforma de orientación vocacional se debe hacer el proceso de pago, ya que estas direccionan al comprador a los propios sitios de la entidad bancaria, en donde éste se siente seguro, y donde obtiene todas las garantías de realizar un pago confiable. Cuál es la información clave a considerar La propuesta de valor fundamental que el padre de familia debe considerar para escoger el test vocacional más adecuado, certero, objetivo y efectivo para su hijo es el informe final que recibirá, pues esa es la información valiosa que están buscando para orientarse. Entre más variables de análisis contenga el informe más acertado e indicado será el test vocacional, pues podrá dar más elementos de análisis en la toma de decisiones profesionales de su hijo. Todo el resto de informaciones y elementos que pueda encontrar en la página web de los sitios es construida por expertos en mercadeo, más que por expertos en orientación vocacional. Cuál es la información asociada al sitio web Una de las grandes maravillas de la modernidad es la posibilidad de rastrear totalmente la huella digital de alguna persona o de alguna empresa. Por esa razón, debe hacer búsquedas en línea de información asociada a ese test, o a esa compañía que la desarrolló. El indicador de mayor confiabilidad es que el sitio, o sus creadores, produzcan contenido relacionado con orientación vocacional de calidad en televisión, en prensa, en blogs, y que sean reconocidos en un medio medianamente aceptado y visible. Esto indica que ese test está trabajado y actualizado constantemente, que sus resultados se asocian a investigaciones, a bases de datos cada vez más grandes, y que sus resultados son muy confiables. Entonces, lo ideal es tener las claves para poder descifrar los grandes flujos de información que nos encontramos en la red, y para discernir, de todo el universo de información disponible en la red, cuál es la más apropiada para cada usuario. Siempre con el firme propósito de acompañar de forma activa el proceso de decisión vocacional de los hijos, en este caso, en la escogencia de un test
Ventajas de los test vocacionales
Los test vocacionales de hoy y su apuesta didáctica de valor Para un psicólogo escolar que trabaje en colegios con adolescentes, es fundamental recordar lo que indica la psicología del desarrollo acerca de éste momento de la evolución, en donde se mezclan los desarrollos cognitivos con los retos emocionales y físicos, para crear un tipo de seres humanos con una magia y un poder de atracción inigualables en cualquier otro momento de la evolución. Esto trae consigo ciertas dificultades, típicas también del momento de desarrollo de los muchachos, en donde el mundo adulto –al cual pertenecen los orientadores del colegio, los maestros, los padres, y en general todos los que tengan edades diferentes a sí mismos- pierde valor para ellos. Es decir, que encuentran los modelos de identificación válidos en sus propios compañeros, y no en los que –como adultos- quisiéramos que tuvieran. Complejidad Esta situación se complejiza, cuando por un lado, están luchando por su identidad, por descubrir quiénes son, qué quieren de la vida, para qué sirven y qué los hace felices, y por el otro lado están día a día tratando de “parecerse” unos a otros, para poder generar patrones de identificación que los hagan sentir seguros consigo mismos. En esta dualidad, que busca identidad individual, pero por otro lado necesita sentido de grupo, está el secreto de cualquier intervención, que desde la orientación escolar se pueda hacer con los adolescentes. Solo entendiendo la dinámica interna de las identificaciones, desde lo infantil hasta lo adulto, se podrá acceder correctamente a esa mente maravillosa de un adolescente en proceso de desarrollo. Históricamente los procesos de orientación vocacional han contado con la ayuda de pruebas estandarizadas, grandes baterías de evaluación con sub pruebas de habilidades académicas, sociales y especiales, escalas para medir intereses académicos y generales, test que incluyen autopercepción y prospección futura, algunos cuestionarios de sentido de vida, e incluso, algunas evaluaciones de indicadores clínicos, con tal de ayudar al joven a conocerse y a trabajar en el sentido de vida adecuado para sí mismo y para su estilo. En esa historia de intervenciones, la psicometría ha desarrollado baterías gigantescas, que si bien han brindado información valiosa, son cuestionadas cada vez más por las características adolescentes, y por las dificultades en la aplicación. Por ejemplo, algunos de estos instrumentos requieren de condiciones de concentración y control para su aplicación, que no son realistas en un salón de clases con 40 adolescentes, como por ejemplo, cuatro horas de duración, silencio y quietud, y rellenar más de cuatrocientos círculos una y otra vez. Los inconvenientes Los inconvenientes de tales intervenciones se encuentran en el lenguaje mismo de los adolescentes, quienes dicen “yo ya sé qué quiero ser, entonces me puse a jugar”, o “yo no tengo ni idea qué hacer, pero me cansé en la pregunta 20 y las contesté azar”, entre otras frases, que denuncian que tal vez, las respuestas a estos típicos test en papel no sean las más confiables. Adicionalmente hoy la neuropsicología nos abre caminos para entender los procesos de atención y focalización en los jóvenes, y en ningún caso avalan que un cerebro fresco, en un cuerpo sobreexcitado de hormonas, pueda ser capaz de concentrarse más de una hora en una sola tarea. Los estudios Ahora, cada vez se encuentran más estudios sobre el nivel de funcionamiento audiovisual de los jóvenes, en detrimento del nivel de funcionamiento lectoescrito, y en este sentido, los test en papel de grandes grupos de preguntas generan algo de aversión, cansancio y falta de credibilidad por las dificultades mencionadas anteriormente para la aplicación. Por esa razón, los test vocacionales de hoy deben hacer toda una renovación, que incluya didáctica, y que actúen siguiendo lo que ya conocemos de la psicología del desarrollo adolescente y la neurociencia. Solo así se podrá dar reales respuestas a las necesidades de conocimiento de los adolescentes, generando credibilidad y confianza en los resultados, son tantos vicios en la aplicación. Pictotest Es una prueba de orientación vocacional que pretende atender a estas necesidades, sobre todo en lo relacionado con la capacidad atencional, la motivación por el uso de redes sociales, y el fácil acceso que plantea el uso de la tecnología en los jóvenes de hoy. Una de las grandes ventajas de Pictotest es que su diseño presenta alto contenido audiovisual, es decir, que usa otros lenguajes, mucho más accesibles a los jóvenes y que generan menos resistencias. Las “preguntas” en Pictotest no son preguntas, sino interacciones, que motivan por sí mismas a ser exploradas, a “dar click” para ver qué pasa, usando adicionalmente esa característica adolescente tan positiva como la curiosidad y las ansias de saber qué hay más allá. El hecho de que sea un test on line significa facilidad de acceso, tanto en tiempo como en espacio. El adolescente tiende a dispersarse, a disipar su energía en varias actividades al tiempo, y pictotest -al tanto de esta característica- le presenta una prueba que puede responder desde su celular, en su computador personal, o en su colegio, en cualquier momento, y al ritmo que requiera. En este sentido, no se tienen dificultades para que la prueba sea terminada, porque poco a poco cada sujeto accede, interactúa, sale, vuelve a ingresar, y cada una de estas interacciones es registrada por la matriz de análisis, para conocer profundamente cómo soluciona sus problemas. Son dos las características esenciales que pictotest utiliza para generar adherencia a la presentación de la prueba: 1. La necesidad y el gusto del adolescente por explorar nuevos escenarios, conocer nuevos retos y descubrir nuevos mundos. 2. La necesidad de tener “respuestas inmediatas”, de que le “digan algo ya sobre sí mismo”, pues evolutivamente se encuentra en estado de necesidad de conocimiento y acción. Con estos dos componentes se garantiza que la presentación de la prueba esté libre de tantos sesgos, uno de ellos la deseabilidad social con el hecho de sentir la prensión de ser evaluados. Con el informe, la innovación que presenta Pictotest es que no se excede en tecnicismos
Beneficios de elegir carrera adecuada
Lo importante de la elección de carrera Una elección de vida Los beneficios, en cuanto a bienestar familiar, de escoger adecuadamente una carrera tienen que ver con lo fundamental de haber encontrado un sentido de vida, una pasión que nos mueva, o sea, un motor para existir, sintiendo que somos importantes, que lo que hacemos deja una huella, y que lo que construimos perdurará por muchas generaciones más. Esto, siendo padres de adolescentes de último año, se expresa de maneras más concretas en el hecho de ayudarles a nuestros hijos a hallar su vocación y a vivir coherentemente con las decisiones que toman. Al elegir carrera Se presenta una de esas oportunidades vitales para dar rumbo a la vida, para agarrar fuertemente el timón del barco y ponerlo en rumbo a donde queremos llegar. Por eso, nadie quisiera equivocarse al tomar una elección profesional, y menos los padres de familia, quienes lo que pretenden es abogar porque su hijo decida con el mayor número de argumentos y razones a su favor, minimizando así la posibilidad de fracaso, desilusión, deserción universitaria, o pérdida parcial del sentido de la vida. Por esa razón, desde los inicios de la psicología como ciencia, existen los test; unas herramientas objetivas para lograr extraer información de un sujeto, y devolvérsela de tal forma que se reconozca, y pueda tener la capacidad para usar dicha información en pro de su construcción personal y del crecimiento de sus potencialidades. ¿Dónde encuentro los test de desarrollo humano? Estos test, se encuentran en todas las áreas del desarrollo humano, y cada día se desarrollan más en lo relacionado con la orientación vocacional. Cada vez más personas en los colegios del mundo, recurren a pruebas psicotécnicas para garantizar que el sentimiento de ajuste con la realidad, y que el bienestar de sus estudiantes crezca a muy buen ritmo, siendo adecuado con sus posibilidades. En otras palabras, la psicología, y la aplicación de test psicotécnicos a los adolescentes de los últimos años de colegio, sirve para que cada estudiante vaya ahondando en su sentido de vida, de tal forma que sepa cómo trabajar, en qué trabajar, y para qué hacerlo. Si estas tres condiciones se cumplen (saber en qué trabajar, cómo trabajar y para qué trabajar) la planeación de metas realistas se convierte en una sana rutina diaria que le otorga sentido a la existencia y permite vivir con trascendencia. Tal vez pueda interesarte: ¿Cómo escoger el Test Vocacional Adecuado? Los padres de familia deben prepararse para reconocer en sus hijos las señales adecuadas, y así poder ir viendo su crecimiento y su capacidad para generar mayor desarrollo a lo largo de sus últimos años de colegio, y a lo largo de su carrera. Por eso, a continuación se expondrán algunas de las señales positivas que cada padre de familia deberá identificar en su hijo adolescente, para que se sienta tranquilo de que está haciendo todo lo necesario para tomar con la mayor consciencia su decisión profesional. Constante actitud de búsqueda, o sea, que el estudiante de último año, a pesar de las dudas, y de la presión que supone escoger carrera, esté abierto a todas las posibilidades, y con mente abierta se arriesgue a buscar, a preguntar, y a indagar incesantemente sobre muchas opciones diferentes al mismo tiempo. Incluso si tales posibilidades no se parecen, es muy positivo, aceptable y normal que estén preguntándose constantemente sobre las oportunidades que tiene el mercado académico y laboral para ellos en el futuro cercano. Paso de la ansiedad paralizante, a una inquietud intencional, es decir que ya no vemos a nuestro hijo desesperado diciendo “estoy perdido, yo no sé qué hacer”, sino “en este momento estoy perdido, y por eso es que estoy buscando”. Aquí hay una diferencia sustancial entre dos estilos de personalidad, el primero, llevado a la inacción por la desesperanza, aguardando a ver si alguna solución mágica lo saca del letargo, y el segundo, con consciencia de que debe generar procesos mentales de elección y hacer lo propio para lograrlo, desde la aceptación de la crisis y la realización de conductas intencionadas para hallar respuestas. Concepción constructiva del cambio, lo que significa que una persona en búsqueda de su sentido de vida, y en condiciones de bienestar emocional, ya no se resiente con los cambios inesperados del mundo, sino que los asume con gallardía, entusiasmo y como posibilidades retadoras para él mismo generar procesos personales de evolución. Supone también que la adaptación al entorno no se da por inercia o por obligación sino por gusto y por un sentido implícito de innovación, desarrollo y construcción. Si esto se da, lo más común es que veamos a nuestro hijo preparándose cada día con emoción y expectativa ante lo que viene, con ansias de vivir y con la intención de crecer a través de cada nueva pregunta que tenga sobre su vida universitaria y profesional. Resolución de deudas emocionales pasadas, pues el cambio del colegio a la universidad implica para el adolescente una nueva oportunidad para tomar en sus manos el rumbo de su vida, enmendando algunos errores del pasado que aún sigan teniendo influencia en su vida. En los procesos de elección vocacional se debe recapitular la vida, y observar sin rencores lo que los adultos hacen, valorar el trabajo de los padres, interesarse por sus historias y sus procesos de descubrimiento vocacional, porque al nutrirse de dicha experiencia, automáticamente el adolescente se está blindando ante las mismas situaciones; esto solo puede ser posible con cercanía emocional y actitud de solución ante aquellas cosas que aún se sienten enredadas en la relación del adolescente con sus papás. Si esto sucede, las opciones de desarrollo se ven más a la mano, y las percepciones de bienestar emocional familiar se multiplican. Un hijo que se conoce a sí mismo es un hijo feliz, o sea, que el resultado de cualquier tipo de exploración emocional es el aumento en el sentimiento de cohesión personal, el incremento de las acciones y los hechos que generan autoestima.
Test vocacionales online: solución para el proceso vocacional en colegios
TEST VOCACIONALES EN LÍNEA Una solución para los procesos vocacionales en los colegios Es una labor propia del rol del orientador escolar de los últimos años en los colegios, garantizar que sus estudiantes, prontos a ser graduados, realicen procesos serios de análisis y búsqueda de carreras; todo ello apoyado en la búsqueda incesante de su verdadera vocación, y siempre con el anhelo de hallar aquel lugar en el mundo al que pertenecen realmente, y donde estarían cómodos y satisfechos para el resto de su vida. Proveer los recursos y las herramientas para que los estudiantes logren descubrir qué es lo que quieren ser es quizá la labor más noble del psicólogo escolar, pues de ello depende el futuro, el éxito, la construcción de la autoestima, y el valor que cada uno de ellos le de a su vida, su profesión y su vocación. Sin embargo, esta labor a veces exige compromisos institucionales adicionales, que algunos colegios se niegan a asumir, como por ejemplo, el uso de pruebas estandarizadas de orientación vocacional, por pensar que esa es responsabilidad exclusiva de la familia. En ocasiones, es el mismo psicólogo, quien con los pocos recursos que tiene a la mano, logra dar algunas pinceladas en este sentido, pero esta es una situación que rápidamente debería ir cambiando en las instituciones, a fin de garantizar que las decisiones profesionales sean realmente tenidas en cuenta, tanto por los estudiantes, como por los padres y por la institución misma. En ocasiones, el psicólogo debe prepararse para ser todo un “administrador financiero”, para poder explicarles a las directivas de sus respectivos colegios los beneficios de la adquisición de tal o cual test de evaluación, para poder sustentar, con argumentos presupuestales, por qué adquirir alguna batería de pruebas psicotécnicas sería una inversión, y no un gasto sin sentido. A continuación, se darán algunas pautas que sustentan, por qué la adquisición de purebas de orientación vocacional por parte del colegio, es una inversión adecuada, sostenible en el tiempo y éticamente responsable en el ejercicio de la profesión psicológica en el entorno de la orientación escolar: Favorece capacidad de auto exploración de los estudiantes de últimos grados: Para un adolescente, quien en la mayoría del tiempo dice sentirse “perdido en la vida” tener la oportunidad de encontrarse consigo mismo es algo que generalmente se agradece. Reciben con bastante gratitud que su propio colegio se preocupe tanto por él, que se tome el trabajo de brindarle una evaluación en todo lo concerniente con sus decisiones profesionales. Los beneficios de conocerse a sí mismo antes de tomar una elección de carrera están más uqe comprobados, pues nacen de la fuente directa de la motivación del estudiante. Permite la creación de todo un programa de orientación: Con datos objetivos, evaluados desde la claridad y la confiabilidad de una prueba externa, se vencen todos los sesgos que se puedan haber generado en la relación previa con el estudiante, y esto lleva a que, a lo largo del tiempo, cada orientador escolar pueda ir creando -en su colegio- un proceso serio, coherente y completo de formación vocacional que incluya sus talleres, conferencias motivacionales, charlas con expertos, entrevistas individuales, y por supuesto, la aplicación de test para darle sentido de realidad a todo lo que se está trabajando. Compromete institucionalmente a toda la comunidad educativa con las decisiones de sus estudiantes: El análisis de los informes grupales que arrojan los test vocacionales actuales en línea -tales como pictotest- permiten que los grupos de profesores, en compañía del orientador, conozcan las fortalezas y las debilidades de sus estudiantes, así como sus intereses y sus posibles orientaciones hacia áreas del conocimiento, de tal forma que puedan abordar sus porpios contenidos con un sentido mucho más cercano a los estudiantes, generando así mayor motivación y posibilidades de preparación para la vida universitaria. Otra ventaja fundamental es que los padres de familia se enteren de lo que se está trabajando y se evidencie con ellos que el colegio –en pleno- está fortaleciendo en sus hijos su capacidad de exploración en pro de que ellos tomen decisiones mejor informadas y con más argumentos de juicio para sus vidas. Permite la comparación entre cohortes y entre sujetos, por grupos de interés Pruebas de orientación vocacional en línea –tales como pictotest- permiten que se puedan comparar grupos diferentes, en las mismas variables, para detectar avance o retroceso en ciertas áreas, así como caracterizar la población en términos de fortalezas o intereses. Esto supone que poco a poco, cada colegio padrá ir manejando una base de datos propia, en donde pueda analizar el paso del tiempo y el impacto de sus cambios en los resultados de los estudiantes. Así mismo, el orientador escolar podrá gestionar su información para analizar el impacto de sus actividades en el proceso de decisión de sus muchachos. Permite generar planes de mejoramiento a largo plazo, según el perfil encontrado en los estudiantes. Información a la mano -flujos constantes de datos sobre la población- lo que crea es la necesidad del cambio y responde a la necesidad de la evaluación constante, en pro del mejoramiento institucional. Cada avance, cambio o diferencia, se podría sustentar objetivamente con la existencia de datos sobre lo encontrado en cada grupo de análisis, y así los planes de mejoramiento tendrán un sentido de realidad más amplio y apropiado para el momento que esté viviendo el colegio. Demuestra el profundo sentimiento de compromiso institucional por el futuro de los estudiantes. Para los padres de familia, ver que sus hijos están trabajando seria y continuadamente bajo un programa estructurado de formación vocacional, es algo que no tiene precio, y que realmente demuestra que el colegio se interesa por los procesos de formación integral, que no simplemente se centra en “dar contenidos académicos” sino en desarrollar completamente cada aspecto de la personalidad de sus hijos. Las compras institucionales de pruebas psicotécnicas, al por mayor, bajan los costos y brindan ventajas de actualizaciones constantes Por último, los modelos de negocio de las empresas que proveen pruebas de orientación
¿Cómo escoger el test vocacional adecuado?
¿Sirven de algo los test vocacionales? Lo que se debe tener en cuenta para escoger el test vocacional más adecuado Para la mayoría de padres de familia, preocupados por el futuro de sus hijos, y conscientes de la importancia de sus decisiones vocacionales, representa un desafío el hecho de brindarles opciones de evaluación profesional que se ajusten a sus necesidades, y les entreguen al final una información veraz, precisa y clara sobre las posibilidades de estudiar tal o cual carrera. Sin embargo, en el mercado, y en formato electrónico , existen tantas opciones que no se pueden distinguir cuáles de ellas son las más adecuadas, y las que de verdad servirán para encontrar elementos claves de vocación. Por esa razón, cada padre de familia debe saber muy bien qué analizar a la hora de escoger un test vocacional para sus hijos, que responda de verdad a las necesidades actuales. Lo que sí es cierto, es que tomar una decisión informada, fruto de un proceso extenso de curiosidad y búsqueda, matizado además con datos sobre el sujeto mismo, multiplica las posibilidades de éxito a futuro, y de satisfacción con la elección tomada; por esta razón, siempre debería considerarse la posibilidad de entregar a los hijos opciones de evaluación que los ayuden a conocerse a sí mismos, y a indagar profundamente las motivaciones que los llevan a tomar sus decisiones profesionales. Lo más usual en el mercado es que se ofrezcan test vocacionales que combinan varias áreas de exploración al mismo tiempo. Se analizarán ahora algunas de las más usuales: La sub prueba común Una sub prueba muy común, de los test vocacionales, es la que evalúa habilidades, o sea, responder a la pregunta “para qué es bueno el sujeto”. Conocer esta información ayuda a ir estableciendo un perfil inicial de talentos, que puede ir asociado directamente con las áreas académicas de las universidades. Por ejemplo, ser conscientes de que las habilidades del pensamiento numérico serían muy bien valoradas en facultades dedicadas a las ciencias económicas y administrativas. Este es un primer paso para la construcción de un perfil profesional, y ayuda a que los estudiantes conozcan sus alcances, sus límites, e incluso las razones para sus decisiones. La otra sub prueba básica es la que evalúa “intereses”, con ella, los test vocacionales tratan de determinar lo que más mueve al sujeto; algunas de ellas solamente tratan con intereses académicos, otras son más amplias e incluyen también intereses generales de la vida, que como clave de interpretación tienen la siguiente inspiración: “nadie desarrolla todo su potencial si no se encuentra cómodo y motivado por lo que hace, así cuente con todas las habilidades para hacerlo”. Lo fundamental Esto es fundamental para tener en cuenta, y por esa razón, la mayoría de pruebas vocacionales lo deberían incluir como eje central de la evaluación. Hasta aquí, lo que el padre de familia podría encontrar en el mercado, para obtener una prueba de orientación vocacional básica, con elementos adecuados que brinden claridad para sus hijos en el proceso de toma de decisión. Sin embargo, hay algunas ofertas más atractivas por la profundidad de los análisis que proveen, y porque además de usar los sub test de habilidades e intereses –mencionados anteriormente- asocian a estos dos otras variables, que en combinación, generan un nivel de confiabilidad mucho mayor, siendo así sus resultados más acertados, más confiables, y con más elementos reales para la toma de las decisiones profesionales. Una de aquellas variables especiales, que algunos test incluyen, es el análisis de los estilos de personalidad. Esta información trata de definir exactamente “cómo es el sujeto”, lo que sumado a “para qué es bueno” y “qué le interesa”, puede revelar componentes más profundos de la decisión. Por ejemplo, es muy importante saber que si se es una persona analítica y reflexiva, el ajuste adecuado sería por alguna ciencia social o humana, en donde su estilo de personalidad sería más valorado y generaría un mayor ajuste con respecto a la identidad profesional futura del sujeto. Caso diferente a si se es un sujeto con un perfil predominantemente activo, llevado a la acción, e incluso con tendencia a las acciones impulsivas, características que serían muy bien valoradas en áreas financieras, relacionadas con el mercado bursátil, y en donde el ajuste de vida, entre personalidad y vocación sería mucho más evidente. Como se ve, gracias al análisis de los estilos de personalidad, los test vocacionales especiales profundizan y permiten otro tipo de discusiones más profundas, con el elemento prospectivo incluido, lo que lleva a que sus resultados “sirvan más”, alcancen mayor nivel de descripción del sujeto y le entregue información más amplia y precisa sobre sus decisiones. Para llegar a este punto, el padre de familia -y el sujeto evaluado- podrían contar con un proceso de valoración profesional completo, yendo a un consultorio psicológico a varias citas, presentando los exámenes y recogiendo luego el resultado. Sin embargo, en muchas regiones de Colombia ni siquiera se cuenta con profesionales en psicología, o en orientación para realizar estos procesos, reservados entonces solo para capitales de departamento y algunas ciudades intermedias. Es entonces una realidad que tener acceso a estas ventajas es bien complejo en muchas regiones del país. Por eso, algunas de estas pruebas, e incluso, procesos completos de orientación vocacional, ya se pueden hacer en línea, desde la comodidad del hogar, o el colegio, o el sitio de trabajo. Y lo mejor de todo, es que en muchos casos, aplicando los test en línea se pueden obtener más datos que los mencionados anteriormente. Existe una prueba llamada pictotest, que ofrece toda la información anteriormente mencionada en formato web, es decir, que contempla las variables de habilidades, intereses profesionales y de vida, estilos de personalidad y áreas de interés académico, pero adicionalmente a ellas, ofrece una predicción estimada del éxito académico futuro del estudiante, en virtud de su “estilo de aprendizaje y de estudio”, lo que la lleva a ser mucho más precisa, veraz y con un nivel de certidumbre superior a
Cómo automatizar procesos de orientación vocacional
Seguro en tu trabajo como orientador vocacional te has preguntado cómo optimizar tu labor, por eso, en este blog el psicólogo Justo Meza propone maneras de optimizar esta ardua labor: Orientación Vocacional “al por mayor” ¿Un dolor de cabeza, o una oportunidad de conocimiento objetivo de los estudiantes? Una de las principales funciones de los orientadores escolares de los últimos años de colegio es generar procesos de evaluación vocacional con fines específicos en la elección de carrera, y en el ajuste de dicha decisión con las habilidades, los intereses y la verdadera vocación de los adolescentes. Sin embargo, día a día, se hace más engorroso hacer procesos efectivos, a profundidad, con conocimiento objetivo y real de cada joven, pues muchos cursos de últimos años tienen entre 30 y 40 estudiantes; generalmente, también hacen parte de las funciones del orientador escolar el trabajo con otros temas, como el desarrollo de la personalidad, la afectividad, la sexualidad, las drogas, el alcoholismo, las dificultades relacionales como el matoneo o el abuso, entre otros. La realidad La realidad entonces es que los orientadores escolares de los últimos años se quedan sin muchas herramientas, y sobre todo, sin tiempo para generar procesos de orientación vocacional que sean efectivos, confiables, útiles y de fácil manejo. En la actualidad existen baterías de pruebas psicotécnicas completísimas, pero así mismo muy engorrosas de aplicar, con grandes demandas de tiempo, no solo para la aplicación de los test, sino para la calificación y la generación de resultados. Esta situación, que desprende directamente de la realidad de los colegios, y de la vida misma de los estudiantes, debe ser atendida oportunamente y con herramientas adecuadas, sencillas de manejar, y sobre todo efectivas cuando se trata de atender, al mismo tiempo, necesidades disímiles de cada estudiante, pero garantizando que cada grupo sea tratado de la misma forma, y en el menor tiempo posible. Si bien la psicología, y específicamente la orientación escolar, no es un campo de atención de emergencias, sí es necesario ser muy oportuno en las intervenciones, y es aquí donde las necesidades objetivas de conocer a profundidad la población con la que se trabaja, se hace más acuciante. Tal necesidad, es actualmente muy bien atendida gracias a los avances tecnológicos, las redes y los recursos informáticos de última generación, capaces de manejar, procesar y elaborar muchos datos al mismo tiempo, organizar información relevante, crear grupos de interés, hacer calificaciones de riesgo, y generar informes sobre la base del análisis de múltiples variables existentes en la red. La automatización de los procesos se ha hecho cada vez más necesaria, para trabajar aprovechando al máximo el tiempo y los datos disponibles de los estudiantes, además, cuenta con un atractivo especial para las nuevas generaciones, quienes consideran que lo digital es lo más confiable, lo más cercano a sus intereses, y lo que mejor los define en parámetros de identificación. Revolución Digital La revolución digital también ha servido a los fines del psicólogo y orientador escolar, ha podido captar y capitalizar millones de datos útiles sobre conductas, actitudes, respuestas, perfiles y acciones, para hacer categorías que permitan generar análisis de comportamientos e incluso predicciones sobre el mundo o sobre los comportamientos futuros. En ningún momento de la humanidad se ha tenido tanto acceso, y tanta capacidad de análisis de grandes bases de datos, que como frutos de un proceso automatizado, permiten que se descubran tendencias, inclinaciones y sobre todo, posibilidades de tomas de decisiones para los adolescentes en el entorno escolar. En redes se repite continuamente que todo lo que buscas está a menos de un clic de distancia, y es así, incluso en el campo de la orientación escolar, específicamente en el área de orientación vocacional de los últimos años, pues lo que en tiempo pasado fuera un dolor de cabeza para el profesional, como aplicar grandes baterías de test, que por cierto los estudiantes calificaban como “aburridísimas”, es ahora reemplazado por sencillas aplicaciones que los estudiantes pueden bajar a sus dispositivos móviles, y responder en cualquier momento de su día, con actitud de mayor colaboración, y en su idioma. Los avances informáticos han permitido que hoy en día, grandes procesos de evaluación de aptitudes, intereses profesionales, gustos, personalidad y vocación, que antes tomaban horas y desgaste en calificación y elaboración de reportes, se encuentren a un solo clic de distancia, pues grandes cúmulos de datos y algoritmos se encargan de valorar las respuestas y de analizar todas las variables comparando las respuestas con tendencias globales en el mismo tema. Incluso, los niveles de complejidad de los sistemas computacionales ha crecido tanto, que –guardando las proporciones- es como si el computador personal fuera el psicólogo que observa a la persona mientras está contestando algún tipo de test psicotécnico. No se trata aquí de que los sistemas de desarrollo de inteligencia artificial, o los grandes test vocacionales on-line reemplacen al psicólogo escolar, o terminen con los puestos de trabajo de muchos psicólogos en su consultorio, al contrario, se configuran como opciones válidas, que responden a necesidades actuales y futuras, y que permiten al psicólogo profesional el acceso a perfiles y a información que antes se tardaba mucho en encontrar. En realidad, facilitan el trabajo en condiciones masivas, como por ejemplo, tener que orientar vocacionalmente a un grupo de cien estudiantes cada semestre. La automatización Toda esta automatización de los procesos de valoración psicológica en orientación vocacional, genera adicionalmente otras ventajas para el orientador escolar, quien puede “jugar con los datos” y organizar la información de los estudiantes según sus necesidades. Por ejemplo, es muy valioso poder conocer los “grupos de riesgo” por bajo rendimiento en algún área académica, u organizar sus datos según las potencialidades más grandes que cada estudiante ha desarrollado, generar grupos de trabajo donde se combinen perfectamente sujetos que –por sus habilidades- puedan ser mentores, y otros que se beneficien de dichas personas. En realidad, nunca se había visto tan claro el panorama de aprovechar la “zona de desarrollo potencial” de L. Vigotsky, en donde se organicen